Una de ellas es la posibilidad de emitir facturas sin identificar al cliente en operaciones que no superen cierto monto. Esto simplifica los procesos de facturación, permitiendo que los negocios operen con agilidad y eficiencia.
Seguí leyendo para entender cuales son los requisitos para que empieces a utilizar esta opción.
La facturación sin identificar al cliente es una práctica fiscal que permite emitir facturas sin detallar el nombre o identificación del comprador en operaciones que no superen un determinado monto.
Esto permite que la facturación sea más ágil y simple, ideal para aquellos que tengan ventas masivas a consumidor final. Aunque también podés hacer uso de esto, si prestas servicios y cumplís con los siguientes requisitos.
Información actualizada a Enero 2024
Cuando el importe de una factura sea igual o superior a $ 191.624 y su receptor sea un consumidor final, habrá que identificarlo en la factura con
La identificación también se realizará cuando el importe de la operación sea igual o superior a $ 95.812 y no se haya pagado con tarjetas de crédito o de débito, tarjetas prepagas no bancarias u otros medios de pago equivalentes conforme normativa del Banco Central de la República Argentina.
Por debajo de este monto, podrías facturar sin identificarlo.
Ojo: La facturación sin identificar al cliente no exime de otras obligaciones fiscales. Tenes que cumplir con todas las demás obligaciones que te correspondan según la situación fiscal, incluyendo la presentación de declaraciones y el pago de impuestos.
La facturación sin identificar al cliente es una alternativa que otorga agilidad y simplicidad para cumplir con las obligaciones de AFIP en las operaciones de bajo monto. Sin embargo, es esencial cumplir con los requisitos y límites establecidos por la legislación fiscal aplicable.
¡Aprovecha esta facilidad tributaria y simplifica tus operaciones de bajo monto para hacer crecer tu negocio con eficiencia y éxito!